En verano, cuando el calor aprieta y nuestras despensas y cocinas alcanzan temperaturas elevadas, es habitual que muchos consumidores se pregunten si el Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE) caduca o puede estropearse. En Aceites Ayozar, como productores comprometidos con la calidad del oro líquido que nace de nuestra tierra, creemos que es fundamental informar bien sobre cómo conservar adecuadamente el AOVE, especialmente en los meses más cálidos del año.
¿Caduca el AOVE?
Técnicamente, el AOVE no caduca, pero sí tiene una fecha de consumo preferente. Esto significa que, pasado cierto tiempo, el producto no se vuelve peligroso para la salud, pero empieza a perder propiedades organolépticas: aroma, sabor, color e incluso parte de sus beneficios nutricionales. La fecha de consumo preferente suele rondar entre los 12 y 24 meses desde la fecha de envasado, dependiendo de la variedad de aceituna, el proceso de elaboración y las condiciones de conservación.
En Aceites Ayozar recomendamos consumir nuestro AOVE preferentemente en el primer año tras su envasado para disfrutar al máximo de su frescura, intensidad aromática y riqueza en antioxidantes naturales como los polifenoles.
¿Qué factores afectan a la conservación del AOVE?
El AOVE es un producto vivo. Aunque no se “pudre”, como puede hacerlo un alimento fresco, sí se oxida y enrancia con el tiempo si no se conserva correctamente. Los principales enemigos del aceite de oliva son:
- La luz: la exposición a la luz directa, especialmente solar, acelera la oxidación del aceite. Por eso es tan importante envasar el AOVE en botellas de vidrio oscuro, como nuestras botellas de cristal, o garrafas opacas, como nuestros formatos PET.
- El calor: las altas temperaturas, como las que sufrimos en verano, degradan más rápidamente los compuestos volátiles del AOVE y hacen que pierda aroma y sabor.
- El oxígeno: al entrar en contacto con el aire, el aceite se oxida. Por eso es mejor mantener siempre bien cerrado el envase.
- El tiempo: incluso en las mejores condiciones, con el paso del tiempo el AOVE pierde parte de sus características sensoriales.
Consejos para conservar el AOVE en verano
Conservar bien el Aceite de Oliva Virgen Extra en verano es clave para preservar su calidad. Aquí te dejamos algunos consejos prácticos:
- Guárdalo en un lugar fresco y oscuro: si tu cocina se calienta mucho en verano, considera guardar el AOVE en una despensa interior o incluso en una alacena alejada de la luz y fuentes de calor.
- Evita dejarlo cerca del horno o la vitrocerámica: son puntos de calor constante que pueden afectar a la temperatura del envase incluso sin darte cuenta.
- No lo metas en la nevera: el frío extremo también afecta a la textura y composición del aceite. Si se solidifica, no pasa nada, pero es un signo de que ha estado expuesto a temperaturas inapropiadas. Puedes leer más sobre cómo conservar el AOVE frente al frío aquí.
- Usa envases pequeños si no consumes mucho aceite: si compras garrafas de 5 litros, transfiere pequeñas cantidades a botellas de cristal oscuro bien cerradas para un uso más cómodo y una mejor conservación. En Aceites Ayozar, ofrecemos garrafas de 2L, para aquellos consumidores que consideran demasiado el formato de 5L.
- Evita envases de plástico fino: pueden dejar pasar la luz y, con el tiempo, transferir sabores al aceite. En Aceites Ayozar utilizamos materiales de calidad alimentaria diseñados para proteger el producto.
¿Y si el AOVE huele o sabe raro?
Un aceite enranciado se reconoce fácilmente por su olor avinagrado, a cartón mojado o a nuez vieja. También pierde el color verde-dorado brillante y adquiere un tono más opaco o amarillento. Si detectas estos síntomas, lo más probable es que el AOVE haya perdido sus propiedades. Aunque no sea dañino para la salud, no es recomendable consumirlo en crudo ni para cocinar, ya que su sabor puede estropear tus platos.
El compromiso de Aceites Ayozar
En Aceites Ayozar cuidamos cada paso del proceso, desde la recolección de la aceituna hasta el envasado, para garantizar que nuestro AOVE llegue a tu mesa en óptimas condiciones. Además, nuestros envases están diseñados para preservar la calidad durante todo el año, incluso en verano.
Recuerda: el AOVE no caduca de forma peligrosa, pero su calidad no es eterna. Una buena conservación es clave para disfrutar de todos los matices y beneficios de este producto excepcional que nos regala la naturaleza.
Este verano, protege tu AOVE como se merece… ¡y saborea cada gota!